El Amigo Compadre
Dibujo "Los dos compadres" según Emily Escalona.
Al Compadre Gerardo Sánchez Porras
¡Qué felicidad tener un compa, como mi Compadre! La vida de cualquier persona cambiaría, como pasó con la mía. La mía se transforma; sin mi compa, no sé, hacia qué punto cardinal la hubiera enrumbado la fuerza del destino; pero llega mi Compadre, cargado de vivencias centrales y llaneras, y se despeja el camino. Con mi compa aparecen los primeros intercambios de inquietudes, contrastación de primeros saberes científicos e impostergables invitaciones para resolver las aparentes incongruencias encontradas en los textos bajo la lámpara de estudio nocturna del momento; o frente al velador del bar de prado verde montaña arriba, bajo mi iniciática fría espumante, servida en espacios claroscuros imbuidos en niebla de cigarro, entremezclada con vaho ardiente de licor de mesas aledañas, y el estruendoso cierre intempestivo de dominó de acción inesperada, donde casi siempre, él tenía las de ganar.